sábado, 29 de enero de 2011

Chocolate con churros

Hoy hemos tenido un día de invierno en toda regla. La lluvia no ha parado de caer y el frío se ha hecho notar ya que hay nieve en la cumbre, sobre todo en Izaña.
Así es que lo más apetecible era quedarse en casa al calorcito, saboreando un rico chocolate con churros.



domingo, 23 de enero de 2011

Almendros en flor. Santiago del Teide





Días atrás decidimos recorrer los más de 90 km que separan Arafo de Santiago del Teide, para ver el bonito panorama que presentan los almendros en flor.
La previsión meteorológica anunciaba precipitaciones por esa zona y a medida que nos acercábamos observamos que estaban en lo cierto, la noche anterior por lo menos, había llovido.
Llegando a Arguayo empezaron a caer algunas gotas,la cosa se estaba poniendo fea. Cuando llegamos al lugar previsto,tuvimos que coger un paraguas que teníamos en el coche pues la lluvia arreció. Pero nosotros no nos íbamos a echar atrás.



Después de sacar algunas fotos y como por arte de magia las nubes iniciaron la retirada y finalmente se quedó una mañana luminosa y espléndida.



Toda esta zona esta cubierta por enormes campos de lava de diferentes erupciones, entre ellas y la más reciente la del volcán Chinyero en noviembre de 1909.



Esta lava de diferentes tonalidades y el contraste de los almendros llenos de flores blancas y rosadas hacen de este paisaje, en esta época, algo muy especial.



Caminamos un buen rato entre los almendros floridos. Bajo ellos una alfombra de hierba y pétalos. Las gotas de lluvia que hasta hacía un momento caían daban al lugar un aspecto más impresionante todavía.





Nos alejamos un poco de la carretera por una pista que nos condujo entre lava y almendros hasta la galería de agua Bilma. Esta galería es una de las tantas que existen por aquí y por toda la isla. El canal que fue usado en su tiempo para transportar el agua que salía del interior de la tierra, está hoy en desuso y en estado ruinoso. Ya no circula el agua por él, sino por una tubería de muy pocas pulgadas por lo que se deduce que esta galería tiene en la actualidad muy pocas pipas de agua.





Ya de regreso al punto de partida vemos como unos cinco o seis coches están aparcados al lado de la carretera y sus ocupantes sacando fotografías y disfrutando de este maravilloso lugar.

sábado, 22 de enero de 2011

Sonidos de la Naturaleza. San Quirce de Durro

Si pinchas en la imagen puedes escuchar los sonidos de las ruidosas cigarras un día del verano pasado.
Las grabamos en los alrededores de la ermita románica de San Quirce de Durro, en el tramo medio del Valle de Boí, en pleno Pirineo.
Esta ermita se encuentra en un bucólico lugar. En lo alto de un promontorio al suroeste de Durro.
Data del siglo XII.

Sonidos de la naturaleza. Torla

Estos sonidos que los puedes oir si pinchas en la foto, los recogimos el pasado verano con una pequeña grabadora Olympus, en el pueblo altoaragonés de Torla.
Podemos escuchar el sonido del río Ara que baja con todas sus fuerzas desde las altas montañas, infinidad de pajarillos y la música de la flauta de un afilador. Esto fue toda una sorpresa, ya que es uno de los tantos oficios que están casi desaparecidos.
Torla está a unos 94 km al norte de Huesca y es la entrada natural al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.

viernes, 21 de enero de 2011

Al amor de la lumbre

La isla de Tenerife se caracteriza por sus temperaturas suaves durante todo el año. Con medias de unos 15 grados centígrados en invierno y 25 grados en verano.
Pero, como se suele decir, Tenerife es un continente en miniatura. Por lo que si se observa más detenidamente, comprobaremos que hay muchas variantes y que estas temperaturas que hemos reflejado anteriormente casi serían las temperaturas de las zonas costeras y que a medida que vamos tomando altura se tornan un poco más extremas.
En las zonas de medianías las temperaturas medias bajan un poco más en invierno y suben también más en verano. La diferencia se hace cada vez mayor cuando nos acercamos a las zonas de cumbre.
Los vecinos de estas zonas en invierno recurrimos a cualquier fuente que nos proporcione un poquito más de calor como estufas, calefactores, chimeneas....

domingo, 2 de enero de 2011

El Volcán de Fasnia

El volcán de Fasnia esta situado muy cerca de Izaña. Se formó en las erupciones que tuvieron lugar en la isla de Tenerife entre finales de 1704 y principio de 1705. Nos referimos a la del volcán de Siete Fuentes ( 31 de diciembre de 1704), al volcán de Arafo o de Las Arenas ( 2 de febrero de 1705) y al que nos referimos aquí, el volcán de Fasnia ( el 5 de enero de 1705). Estos volcanes están separados unos de otros por una distancia de 12 km. y casi en línea recta.
He leído algo curioso, sobre estos volcanes que no me resisto a contar y es que el obispo de Tenerife de aquella época, observó que las erupciones tenían lugar en fechas señaladas para la religión católica: Fín de año, víspera de Reyes y día de La Candelaria. Así que no se le ocurrió otra cosa que subir a los montes de la Isla pensando que estaban poseídos por una fuerza maligna y practicarles un exorcismo. En fin cosas que pasan.
El Volcán está situado en una llanura exterior al circo de Las Cañadas y destaca por su color negro intenso, casi pareciera que lo acabaran de colocar en el lugar.
Aquí dejo algunas fotografías:

Sendero Roque de Ayesa - Montaña de Ayosa. Arafo

Este nuevo año, que acaba de empezar lo recibimos en un sitio muy especial, El Teide. Unos amigos y nosotros quisimos romper con las clásicas fiestas y la verdad es que fue todo un éxito: cero grados de temperatura, un silencio sobrecogedor y un cielo estrellado impresionante, fueron nuestro escenario para dar la bienvenida al 2011.
El día de año nuevo habíamos quedado con nuestros amigos, Eduardo y Marta para hacer un sendero, pero, eso sí, un senderito corto para no tener que madrugar mucho. Así es que a las once salimos de Arafo por la TF-523, que sube hasta la cumbre. El día amaneció nublado y no sabíamos como ibamos a encontrar el tiempo arriba. A medida que subíamos, más o menos a la altura de la Montaña Colorada, empezamos a ver una cierta claridad detrás de las nubes, era un buen augurio, seguramente íbamos a tener un buen día. Así fue, en el cruce con la carretera TF-24 (La Laguna- El Portillo) había ya un bonito cielo azul y un sol radiante.
Seguimos por la TF-24 y a la altura de Ayosa dejamos el coche, para iniciar nuestra caminata.
El camino transcurre todo entre pinares, como no está muy transitado vamos con cuidado, pues el suelo del sendero está totalmente cubierto de pinocho (pinocha)que nos puede hacer resbalar. A nuestro paso donde la tierra tiene más humedad, hay cristalitos de hielo, que se han formado la fría noche anterior.



Llegados a un punto el sendero se bifurca, tenemos la opción de ir en dirección norte o sur. Cogemos la primera pues queremos ir al Roque de Ayesa, que está muy cerca y desde allí hay una vista impresionante.
El Roque de Ayesa está formado por grandes bloques de un picón rojizo, que le dan un aspecto muy peculiar al lugar.



Desde allí vemos el mar de nubes que cubre todo el valle de Guímar y que antes lo habíamos visto desde abajo. La nubes están muy compactas e incluso observamos como tienen dos alturas, al final, allá sobre el horizonte, las cumbres de la vecina isla de Gran Canaria.



Si miramos hacia el norte vemos toda la cordillera dorsal hasta el mismo faro de Punta Hidalgo. Aunque las nubes, quitan algo de visibilidad, ya que están entrando hacia este lado por las partes más bajas.



Si seguimos mirando a nuestro alrededor vemos grandes extensiones de pinares y el Teide con un poco de nieve en la parte más alta.



Después de mirar detenidamente esta maravilla de paisaje nos sentamos un buen rato, para escuchar el silencio unas veces y otras una amena conversación.
Nos entretenemos en mirar a un cérnicalo que muy cerca de nosotros se detiene en el aire sin agitar sus alas, observando a su presa, para de repente en picado caer sobre ella.
Al rato seguimos nuestro camino, ahora en dirección sur.



Siempre entre pinos llegamos a la montaña de Ayosa (2077 metros). Aquí nos encontramos un paisaje espectacular, a pesar de las antenas que hay en la misma.
El terreno está formado por grandes piedras redondeadas formando un conjunto muy curioso.



Desde esta panorámica vemos La Caldera de Pedro Gil a nuestros pies.



Su extenso pinar.



El cono de la montaña de las Arenas cubierto en parte por las nubes que tímidamente quieren abrirse paso al interior de la misma, hacen de este paisaje algo único.







Después de haber hecho otra larga parada, retomamos el mismo sendero para regresar al lugar de partida.